La jornada electoral en Estados Unidos comenzó temprano este martes con la apertura de los primeros centros de votación a las 5:00 a.m. hora local en algunos estados. En esta elección presidencial, los votantes deberán elegir entre la vicepresidenta y candidata demócrata Kamala Harris y el expresidente republicano Donald Trump. Durante las siguientes horas, irán abriendo los centros de votación en diferentes estados, siguiendo los seis husos horarios del país y las regulaciones locales que determinan los horarios de apertura y cierre.
Esta contienda se presenta muy reñida, con Harris manteniendo una pequeña ventaja de poco más de un punto porcentual en el promedio de encuestas nacionales. Sin embargo, en Estados Unidos no se elige al presidente por voto popular, sino a través del Colegio Electoral, compuesto por 538 electores. Para ganar, un candidato necesita al menos 270 votos del Colegio Electoral. La elección se centra en un puñado de estados clave —como Georgia, Carolina del Norte, Míchigan, Wisconsin, Pensilvania, Arizona y Nevada— que podrían inclinar la balanza hacia cualquiera de los dos candidatos.
Además de la elección presidencial, los estadounidenses también votarán para renovar los 435 escaños de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, así como para elegir a varios gobernadores, alcaldes y legisladores estatales. También se votarán importantes iniciativas ciudadanas, entre las cuales destacan propuestas relacionadas con el derecho al aborto en diez estados.
Un total de 244 millones de personas están convocadas a participar en estas elecciones, y más de 80 millones ya han emitido su voto anticipado, tanto en persona como por correo.
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