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Harris se compromete a eliminar los impuestos a las propinas, una medida también propuesta por Trump.


La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se comprometió el sábado a trabajar para eliminar los impuestos sobre las propinas que reciben los empleados de restaurantes y otros sectores de servicios, replicando una promesa hecha por su rival electoral, Donald Trump. Este anuncio refleja una coincidencia poco común entre ambos partidos.


Harris realizó su anuncio en un mitin en la Universidad de Nevada, Las Vegas, una ciudad cuya economía depende en gran medida de la industria hotelera y del entretenimiento. Trump había hecho una promesa similar en junio durante un mitin en la misma ciudad, aunque tanto él como Harris enfrentarían dificultades para cumplirla sin la intervención del Congreso.


"Mi promesa a todos ustedes es que, cuando sea presidenta, seguiremos luchando por las familias trabajadoras en Estados Unidos", afirmó Harris. "Esto incluye aumentar el salario mínimo y eliminar los impuestos sobre las propinas para los trabajadores de la hostelería y servicios".


Poco después, Trump respondió en sus redes sociales, acusando a Harris de copiar su política de "CERO IMPUESTOS A PROPINAS". "La diferencia es que ella no lo cumplirá, ¡solo lo busca con fines políticos!", escribió el expresidente. "Esta fue una idea de TRUMP. Ella no tiene ideas propias, solo puede robarme las mías".


Harris, junto con su compañero de fórmula, el gobernador de Minnesota Tim Walz, llegó a Nevada como parte de una gira por estados clave, donde su partido ha mostrado un renovado impulso tras la retirada del presidente Joe Biden, quien ha dado su respaldo a Harris. El domingo, la vicepresidenta lideró un evento de recaudación de fondos que recaudó más de 12 millones de dólares, según su campaña. Está previsto que la expresidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, también hable en el evento.


El sábado, más de 12,000 personas asistieron al evento en el estadio de baloncesto universitario, y debido a las altas temperaturas de 42 grados Celsius (109 Fahrenheit), las autoridades locales cerraron las puertas antes de que comenzara el acto, ya que algunas personas se sintieron mal mientras esperaban en la fila. Alrededor de 4,000 personas estaban en la fila cuando se cerraron los accesos.


Walz mencionó este incidente durante su discurso, pero lo utilizó como motivo para aplaudir al prometer que "no teman, vamos a volver muchas veces".


Harris esperaba que este viaje ayudara a ganar apoyo entre los votantes latinos. En 2020, Biden ganó por un estrecho margen en Nevada, superando a Trump por 2.4 puntos porcentuales.

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