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Sam Altman y Bill Gates coinciden en un punto crucial para el futuro de la IA: la clave está en formular las preguntas correctas.


Sam Altman, CEO de OpenAI, y Bill Gates coinciden en que el futuro de la innovación radica más en la habilidad de formular las preguntas adecuadas que en la acumulación de conocimientos. Este cambio de enfoque destaca la importancia de las habilidades relacionadas con la curiosidad, la capacidad de síntesis y el pensamiento crítico, fundamentales para aprovechar al máximo las herramientas de inteligencia artificial (IA).


Durante una entrevista en el podcast *ReThinking* de Adam Grant, Altman explicó que ya no se valorará únicamente el conocimiento almacenado, sino la capacidad de identificar y conectar ideas. Según Altman, "hacer las preguntas correctas será más importante que conocer la respuesta", ya que estas guiarán el desarrollo de soluciones innovadoras. Esta perspectiva es respaldada por Bill Gates, quien ha señalado que, en su experiencia, la resolución de problemas siempre comienza con las preguntas adecuadas, una técnica que aplica incluso en temas como el COVID-19.


Un nuevo perfil profesional: el diseñador de preguntas .

La reflexión de Altman plantea la posibilidad de un nuevo rol profesional en la era de la IA: diseñadores de preguntas. Estos especialistas serían responsables de formular preguntas precisas y relevantes para herramientas de IA generativa, permitiendo que estas ofrezcan respuestas de alta calidad. Lydia Logan, de IBM, destacó que esta habilidad ya es muy valorada en el mercado laboral, especialmente en Estados Unidos, donde estos perfiles comienzan a tener salarios elevados. Logan subrayó que sin buenas preguntas, los resultados de la IA son deficientes, reforzando la importancia de este nuevo conjunto de habilidades.


Las habilidades blandas como ventaja competitiva

Además de un rol técnico, la capacidad de formular preguntas se considera una habilidad blanda esencial. Asociada a la curiosidad, la adaptabilidad y el aprendizaje continuo, esta habilidad es cada vez más valorada en un mundo donde los conocimientos rápidamente se vuelven obsoletos. Mark Zuckerberg señaló en una entrevista que las empresas ahora priorizan estas cualidades sobre los títulos académicos, ya que el futuro requiere trabajadores flexibles y con una mentalidad de crecimiento.


El informe *Competencias laborales más demandadas para 2025* de Randstad respalda esta idea, identificando la mentalidad de crecimiento como una de las habilidades más buscadas.


El rol humano en la era de la IA


Aunque la IA está destinada a asumir tareas administrativas repetitivas, Altman enfatizó que no reemplazará el intelecto humano ni el pensamiento creativo. La tecnología necesitará del razonamiento crítico y las habilidades humanas para generar ideas y fortalecer sus argumentos. Según Altman, el futuro de la resolución de problemas combinará la creatividad humana con un enfoque basado en los primeros principios, cuestionando todo desde el inicio para encontrar soluciones únicas.


Este enfoque redefine el panorama laboral y educativo, mostrando que el éxito en la era de la IA dependerá más de habilidades como la curiosidad, la creatividad y la capacidad de hacer preguntas, que de los conocimientos técnicos tradicionales.

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